Paseando en la Ciudad: SAN ANGEL

30.04.2013 16:34

 


Para los amantes de la Zona de San Angel Plaza San Jacinto es un lugar que no podemos dejar de visitar. Contrariamente a lo que podríamos esperar un domingo por la mañana, la zona es bastante tranquila y no hay demasiada gente (menos que en un Centro Comercial a esta misma hora...). Hay varios lugares donde se puede tomar un abundante y tradicional desayuno y la Plaza se presta a un agradable paseo con una carreola.

Si deciden visitarla en sábado, aunque habrá más gente, no pueden dejar de visitar el Bazar de los Sábados, el cual tiene una serie de tienditas con artesanías finas y con varios artículos que les pueden gustar a  los niños (hay unos vestidos bellísimos para las niñas). NO puedo dejar de mencionar que si van con bebés, el Bazar aunque tiene baño No tiene cambiador de bebés ni en el baño de mujeres ni el de hombres. El acceso al bazar también es un poco incómodo (aunque no imposible) con la carreola. Nosotros optamos por comer en otro restaurante (que sí tenía cambiador) y después pasear en el Bazar.

 

Vale la pena también mencionar en forma especial al "Hacedor de Tormentas" (bautizado así por mi hijo quien no pudo resistirse a un extraño artilugio que genera tormentas....) quien vende instrumentos  musicales que él mismo fabrica (incluyendo algunas sonajas tejidas con mimbre que a mi pequeña le encantaron). Se le puede buscar en su cuenta de facebook artesaníamusical/mex. 

También quedamos gratamente sorprendidos con el museo Casa del Risco y el Centro Cultural Isidro Fabela. No es particularmente un museo para niños, pero el museo es muy tranquilo, el acceso (al menos en domingo) es gratuito, se puede acceder fácilmente con una carreola y a fin de celebrar el día del niño, el Centro Cultural ofrecía actividades especiales para los niños (también gratuitas). Las personas que estaban dirigendo las actividades fueron muy amables.  


Por supuesto que no todo es perfecto y sin lugar a dudas hay mucha cosas a mejorar para hacerlo más amigable para los pequeños visitantes. Fuera del parque es difícil pasear con la carreola (porque la banqueta está empedrada y es muy irregular), los baños del museo aunque están limpios no cuentan con cambiador (y ojo que no pretendo criticarlos puesto que la labor que hace el museo me parece increíble pero me parece importante compartir la información) y el valet parking tarda horrores en llevar el auto (en circunstancias normales tampoco tengo queja al respecto, sobretodo si estoy paseando, pero es importante que lo consideren porque los niños suelen ser menos pacientes. 

 

En todo caso el paseo me parece muy recomendable.